Belen Capristo

Hace años, no la he podido olvidar, le dije que me gustaba el juego de ver quien dominaba a quien. Quien lograba someter al otro follaba al otro. No me imaginaba la fuerza que tenía me manejó como un muñeco, traté de luchar, pero en menos de 30 segundos tenía su vergota en mi boca, creo que el juego le gustó porque estaba durísima... pese a traté de escapar, me penetró sin compasión por más de media hora, solo cuando le supliqué que parara, terminó y me lanzó su leche en la cara... a los minutos quería continuar, pero yo estaba destruido, tuve que salir de escapada... Ahora que está en España la extraño

Belén se ha convertido en mi diosa. Hará un par de semanas, quedo con ella. Con las prisas, llego un poco antes, así que la llamo y me voy a tomar un café. No he acabado el café y me llama que ya está disponible. Casi se me cae el café de los nervios que tengo. Parezco un primerizo. Subo y, nada más verla, se me pasan los nervios, pero no el calentón. Entro a su piso. Me pasa a la habitación en la que hay una cama. Charla normalita en la que ves que es muy buena gente. Se tumba en la cama con ese cipote que me hace babear. Ni me acuerdo que quería besar esa boca. Me bajo y empiezo a comerme su polla lo mejor que sé. Sigo lamiendo sus huevos y acabo con mi lengua en su culito. Escucho su dulce voz diciendo que soy muy morboso. Me encanta! Me pregunta si quiero que me folle. Qué si quiero? Lo estoy deseando, pero tan solo asiento y me pongo a 4. mmmm. Aquello empieza a entrar en mí y disfruto más que un tonto con un lápiz. Empieza a bombearme y le pido que me dé cachetes mientras me bombea. Me hace sentirme una perra auténtica y, encima, me lo va diciendo. Yo, sobrepasado por la situación, se me ocurre pasar la mano por debajo y acariciar sus huevos. Me dice, con toda dulzura, que pare, que si no, se correrá. Ahí sí que le digo que, si tiene que correrse, que lo haga en mi boca. Y así es. Se quita la goma y me la mete en la boca para soltarme el néctar que, agradecido, me trago al momento antes de volver a metérmela en la boca para limpiar por si había quedado algo. Acabo corriéndome yo también. Baño, charleta y besito de despedida. Espero volver cuanto antes para poder estar con mi niña